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23 de septiembre de 2012

La Valeta, la Ciudad Fortaleza

     Dada su estratégica posición en mitad de un cruce de caminos en el Mediterráneo, La Valeta ha sido codiciada por todos los imperios europeos desde la antigüedad. Todos ellos dejaron su huella en esta ciudad, ocultando en cada uno de sus rincones, un entorno histórico sin igual.
     Es la Ciudad Fortaleza, una joya arquitectónica única, una mezcla de pasado y presente, de historia y cultura. Tras sus muros reside su magia, al franquearlos y adentrarte en ellos sientes que te acercas a una historia tan viva, que casi, puedes tocarla. Y esa hermosa sensación es la que me invandió a mí, desde la primera vez que vi aparecer La Valeta ante mis ojos.
 
La Valeta desde Sliema Ferries. 
 
     A penas llevábamos unos días en Malta cuando decidimos visitar la capital del país. Nuestra intención era solicitar el documento nacional de identidad maltés, conocido como Identity Card, para tener un pequeño descuento al utilizar el transporte público. 
     Así que a primera hora de la mañana tomamos el autobús y pusimos rumbo a La Valeta, sin sospechar que estábamos a punto de descubrir, una fascinante ciudad.
 
Puerta de las Bombas.
 
 Iglesia de San Publio en Floriana.
 
 
 
Alrededores de La Valeta.
 
Fuente de Tritón.
 
Memorial de la Guerra.
 
Vista de Las Tres Ciudades desde La Valeta.
 
 
 
 
 
 
 
     La terminal de autobuses se encuentra justo al lado de la Fuente de Tritón, y desde ella puede enlazarse directamente con la calle principal que atraviesa de punta a punta la ciudad, la famosísima Republic Street, abarrotada de tiendas y restaurantes, y río incesante de turistas. En ella se encuentran, algunos de los edificios más importantes del país.
 
 
Catedral de San Juan.
 
Biblioteca Nacional.
 
Palacio del Gran Maestro, actual Parlamento.
 
Plaza de San Jorge.
 

     Si algo caracteriza a La Valeta, son sus largas y estrechas calles en cuesta repletas de coloridos balcones que parecen no tener fin, y la arquitectura de sus magníficos edificios. Por esa razón, perderse por entre sus calles sin seguir una ruta o itinerario, es la mejor manera para descubrir y sentir, su verdadero encanto.

 Típica calle en La Valeta.


Catedral Anglicana de San Pablo.
 
 
Fachada de la Catedral Anglicana de San Pablo.

Fachada de la Iglesia Carmelita.
 
 
El Teatro Manoel es uno de los más antiguos de Europa.
 
Balcones en La Valeta.
 
 
 
 
 

 Fuerte Manoel.

     Sin duda, una de las cosas más fascinantes de La Valeta es pasear por sus jardines, conocidos como Barracca Gardens y separados en dos niveles. Desde los Lower Gardens puede disfrutarse de unas increíbles vistas del Gran Puerto, que es uno de los puertos naturales más grandes del mundo. En los Upper Gardens se encuentra el Museo de la Guerra y su privilegiada ubicación ofrece una impresionante panorámica de Las Tres Ciudades.

Lower Barracca Gardens.
 
 
Campana conmemorativa por los caídos durante la Segunda Guerra Mundial.
 
Monumento al Soldado Desconocido.
 
 
 
 
Gran Puerto de La Valeta.
 
 
 
Upper Barracca Gardens.
 
 
 
 
 
Vistas del patio del Museo de la Guerra desde los jardines.

 

     Cerca de estos últimos, en la Merchant Street, se encuentran dos de los siete albergues que formaban la Orden de los Caballeros Hospitalarios de San Juan. Estos albergues se correspondían antigüamente con la nacionalidad de los caballeros que formaban dicha Orden y aunque no todos se conservan actualmente, los que todavía pueden contemplarse nos dan una idea de la importancia que tuvieron en aquella época.

Albergue de Castilla y León, actual sede del Gobierno y residencia del Primer Ministro.
 
 
Albergue de Italia, actual Punto de Información Turística.
 
 
 Palazzo Parisio, antiguo alojamiento de Napoleón durante su estancia en la isla.


 Iglesia de Santa Catalina de Italia.
 
Vistas desde la terminal de autobuses.
 
 
     Cuán hermosa es La Ciudad Fortaleza al atardecer, teñida de un color anaranjado, mientras los rayos de sol se reflejan en sus cristales. Hay ciudades que poseen un embrujo único y despiertan en nosotros sensaciones indescriptibles. Hay lugares que permanecen para siempre en nuestra memoria.
     Nunca olvidaré lo que sentí aquella mañana, cuando por primera vez vi esta hermosa ciudad, que desde entonces, no ha dejado de fascinarme.

2 comentarios:

  1. Realmente son sorprendentes las fotos tomadas, sobre todo las de los jardines, son las que más me recuerdan a ese primer día mío de llegada, donde además nos decidimos a sentarnos un rato después de tanta caminata en aquellos bancos observando desde ese lugar todo lo que nos rodeaba, los jardines florecidos y al otro lado las vistas al mar y que gracias a que hiciste de guía turística, me queda un agradable recuerdo de ese día en Malta.

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    1. Llegando a Castellón empezaba a amanecer, el cielo se volvía poco a poco anaranjado y comenzaban a divisarse el mar y montañas con escasa vegetación.
      Por alguna razón, ese paisaje me ha hecho viajar de nuevo a Malta y una sonrisa se ha dibujado en mi rostro al sentir, que un pedacito de mí, se quedó allí.

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