La vida es lo que hacemos de ella. Los viajes son los viajeros. Lo que vemos no es lo que vemos, sino lo que somos.

31 de agosto de 2012

Mdina, la Ciudad del Silencio

     Situada casi en el centro geográfico de la isla, se alza sobre una colina, rodeada de campos y chumberas, la que fuera angitua capital del país, Mdina.
     Pasear por esta hermosa ciudad, es pasear por lo bello y recorrerla al atardecer, cuando el cielo se torna de un color anaranjado, es sentirse inmerso en un sueño medieval.
 
 
Villa romana situada en los alrededores de la muralla.
 
Puerta de acceso a La Ciudad del Silencio.

León custodiando la entrada.

Dentro de la ciudad amurallada.
 
 
 Palacio de Vilhena.
 
 Este Palacio alberga el Museo de Historia Natural.
 
 
 Mdina es conocida por su producción de vidrio.
 
Calles de Mdina.
 
 
 
 
Iglesia de San Roque.
 
 
 Catedral de San Pablo.
 
 
 
Museo de la Catedral.


 
 
     Una de las vistas más impresionantes de Mdina puede disfrutarse desde la terraza del conocidísimo Restaurante Fontanella debido a su excelente ubicación.
     Contemplar un paisaje como éste mientras saboreas uno de sus fabulosos pastelitos y batidos, es un auténtico deleite para los sentidos.
 
Restaurante Fontanella.

Vistas de la Catedral desde el restaurante.

Vistas desde nuestra mesa en la terraza.

 
 
 
 
 Batido de vainilla y pastelito de chocholate.
 
Caballero maltés.





 
 
Empieza a atarceder en Mdina.
 
 
La muralla.
 



     Es Mdina tal vez, la joya más preciada de Malta. El tesoro más valioso que puede hallar el viajero.

2 comentarios:

  1. Recomiendo los pasteles!!!

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    1. I jo recomano pendre els pastissos desde la terrassa!!.

      Es pot saber qui va a Mdina i es queda a la planta baixa?. Només tres catalanes que conocí cuando iba a comprar vinos. Si es que ya sabía yo, que con aquellas pintas, a primera hora de la mañana y en Malta, no podían ser muy normales.

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